Casi pareciera que fué ayer cuando atravesaste el lugubre humbral de esa puerta, cargada de maletas innecesarias. Pues, bien sabia yo, que con tan solo el hecho de que te marcharas, para mi te llevabas TODO.
Te llevabas mis alegrías, mis sentimientos, mi vida y lo
empacabas en un bolso lleno de orgullo y desprecio.
Solo podía llorar y torturarme viendote salir de aquel lugar en que algun dia fui feliz. Tu mirada fria, no expresaba ni tan solo una misera porcion de compasión.
No quedaba nada, absolutamente nada, de la mujer, mas bien niña que hace algun tiempo conocí. Habias cambiado, eso era claro.
Con un sonido poco audible, dije: "Adios!".
Mis lagrimas calleron al instante que pronuncié aquellas palabras.
No me despedia de tan solo una Mujer... me despedia para siempre del Amor de mi Vida, de la persona que me recogió de el inmundo basural de llantos y lamentaciones en el que solia vivir. Me curaste las heridas, cuidaste de mi... mas ahora... clavabas con mas fuerza aquel puñal mortifero que ya daba por olvidado. Dolía, verte partir sin siquiera mirarme por un segundo a los ojos, desearme que estuviese bien (aunque por mas que lo desearas, sabia que no seria asi).
Mas tú eras indiferente a todo lo que yo sentia.
Con la mirada perdida, dijiste suavemente: "Olvida todo...no vale la pena..."
Tomaste todo y emprendiste tu caminar.
Yo parado ahi con los brazos agarrotados a cada lado mirando el suelo y casi sin poder respirar y mi llanto contener pues mi mundo que hace un rato giraba... ahora se volvía a detener.
•Escrito por: Wladimir Santander ®
•Inspiración: ►The Scientist-Coldplay
(Relato ficticio)*
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